EDITORIAL

De números y aniversarios

No nos gusta caer en el facilismo de que el calendario nos paute alegrías o saludos.  No solemos caer en esa recurrencia tonta de acordarnos de un amigo cada 20 de julio conmemorando que dos individuos pisaron suelo lunar y otro quedó dando vueltas esperándolos. Pero cada vuelta del calendario lleva a que inevitablemente miremos hacia atrás. Será porque en el fondo tenemos  espíritu de amanuenses que, ábaco en mano, necesitamos registrar todo lo que hemos hecho o dejado  de hacer para justificar nuestra existencia.

Lo cierto es que hoy, 18 de agosto de 2012 se cumplen exactamente  dos años de aquel otro 18 de agosto cuando colgamos por primera vez una información en esta revista-blog y el balance  parece inevitable, recurrente,  obvio:

1.534 noticias publicadas

Más de 112 mil visitas. Lo que da un promedio mensual  casi 4.700 lecturas.  O sea 157 visitas diarias.

Lo que dicho de otra manera significa que 6 personas por hora en algún lugar del plantea están leyendo HUM BRAL.

Y nos leen en 62 países:  Uruguay, Argentina, Brasil, Paraguay, Perú, Chile, Venezuela, Ecuador, Colombia, Bolivia, Costa Rica, Honduras, Guatemala, República Dominicana, El Salvador, Panamá, Cuba, México, Puerto Rico, Antillas Neerlandesas, Estados Unidos, Canadá, Noruega, España, Francia, Italia, Portugal, Reino Unido, Irlanda, Austria, Suiza, Alemania, Países Bajos, Dinamarca, Grecia, Rusia, Bélgica , Bulgaria, Letonia, Hungría, Bosnia-Herzegovina, Ucrania, República Checa, Polonia, Turquía, Arabia Saudita, Costa de Marfil, Nigeria, Burkina Faso, Senegal, Australia, Eslovenia, Israel, Siria, Corea del Sur, Filipinas, Indonesia, Hong Kong,  Japón, India, China, Macao, Malasia.

Por eso una vez más desafiamos a quienes afirman que la cultura no le  interesa a nadie, que ya no son necesarios los suplementos culturales en la prensa escrita, o las informaciones del arte y  las manifestaciones culturales auténticas en los medios de comunicación masivo.

Pero basta de balances y de números. Una vez más seguimos afirmándonos en la frase del célebre  Roberto Arlt: “El futuro es nuestro por prepotencia de trabajo”, porque como  solemos repetir todos hacemos y somos parte de la cultura.