viernes, 25 de noviembre de 2011

Letras suicidas


Aldo Roque Difilippo

El caso de Pilar Donoso recuerda los suicidos de Margaux Hemingway nieta de Ernest Hemingway, y aquí en el Río de la Plata el trágico destino de Horacio Quiroga y sus tres hijos.  Pero a lo largo de la historia la literatura y el suicidio han tenido una larga relación. A riesgo de omitir algún caso, vaya aquí una lista, que quizá los lectores de HUM BRAL nos ayuden a completar. Es que se ha escrito muy poco sobre este tema, donde en algunas biografías apenas si se apunta murió en tal año, porque de estos temas casi nadie quiere hablar.

1770- Tómas Chátterton (1752-1770): poeta inglés que se envenenó para no soportar la miseria.

1811- Heinrich Von Kleist (1777-1811): se suicida con su amante Henriette Vogel, a orillas del pequeño río Wannsee, cerca de Berlín.

1837- Mariano José de Larra (firmaba con el seudónimo de Fígaro -1809-1837): se mata de un tiro en la sien.

1873- Manuel Acuña (mexicano): se suicida por amor.

1896– José Asunción Silva (1865-1896): poeta colombiano, tras una pequeña velada con algunos amigos, José Asunción Silva sé disparó un tiro en el corazón, donde previamente se había hecho dibujar una cruz por el médico y amigo de infancia Juan Evangelista Manrique.

1898- Ángel Ganivet (1865-1898): se suicida tirándose al río tirándose al Río Dvina  (Letonia)
Emilio Salgari

1911-Emilio Salgari (1863-1911): contrae un grave aneurisma que lo induce al suicidio.

1914- Gregor Trakl (1887-1914): poeta austríaco. Muere por una sobredosis de cocaína.

1916- Mario de Sa Carneiro (1890-1916): Decepcionado por la diferencia entre su vida real y la que imaginaba, entró en una progresiva depresión, que le condujo al suicidio, perpetrado en el Hôtel de Nice, en Montmartre, mediante la ingestión de cinco frascos de arseniato de estricnina en presencia de su amigo José de Araújo. Tenía tan sólo veintiséis años.

Jack London
1916- Jack London (1876-1916): Su muerte está llena de controversia. Muchas fuentes antiguas la describen como un suicidio. Sin embargo, esto parece presentarse como un rumor, o como una especulación apoyada en los incidentes que tienen lugar en sus escrituras ficticias. Su certificado de muerte establecía la causa en una uremia. Se sabe que sufría un dolor extremo y que estaba tomando morfina, y es posible que una sobredosis de morfina, accidental o deliberada, pudo contribuir.

1925-Sergei Esénin (1895-1925): se suicida cortándose las venas y ahorcándose con una cuerda ajustada de uno de los tubos de su habitación. Dejó una carta escrita con sangre.
 

1929- Jacques Rigaut (1829-19219): eta surrealista nacido en París. Su obra más importante, Agencia General del Suicidio, tiene el germen que prevé su propia tragedia, pues para Rigaut la vida no era más que el periodo de preparación para el acto supremo de suicidarse.
El 5 de noviembre de 1929 y estando en una clínica de desintoxicación, una vez tomada la decisión de matarse, se vistió completamente, se tendió en la cama y se rodeó de almohadones para que el impacto del disparo no le hiciera perder la postura. Hecho esto se disparó una bala en el corazón, con la que consumó un suicidio para todos anunciado

1930- Vladimir Maiacovski (1893-1906): se suicidó de un disparo en el corazón sin que se hayan podido dilucidar, con claridad, las causas de esa determinación. Es probable que intervinieran factores emocionales, como algunas críticas severas por su expresivo «individualismo».

1930- Guillermo Ramos Sucre (1890- 1930): poeta, educador y diplomático venezolano, se suicida al tomar una sobredosis de veronal.

1932- Hart Crane (1899-1932): De producción relativamente escasa debido a su temprana muerte, es sin embargo considerado uno de los poetas anglosajones más influyentes del siglo XX. En 1932, cuando se encontraba realizando en barco el viaje de vuelta desde México a Nueva York, trató de establecer relaciones con un marinero, lo cual hizo que la tripulación le pegara una paliza. Convencido definitivamente de que no podía ser feliz debido a su condición de homosexual, se arrojó pocas horas después desde la borda del barco delante de decenas de testigos gritando "¡Adiós a todos!". Su cuerpo nunca fue recuperado.

1933- Raymon Roussel (1877-1933):  se suicida por una dosis de barbitúricos.

1935- René Crever (1900-1935):  se suicida al tomar conciencia de la gravedad de la enfermedad que lo aquejaba (tuberculosis)

1937- Horacio Quiroga (1878-1937): toma cianuro al saber que padece cáncer. Sus tres hijos y su primera mujer también se suicidan.
Alfosina Storni

1938- Alfosina Storni (1892-1938): se suicida arrojándose la mar.

1938- Leopoldo Lugones (1874-1938): en un recreo del Delta de Tigre, llamado El Tropezón, se suicida al ingerir una mezcla de whisky y cianuro. Las causas de su muerte fueron atribuidas a la frustración política, pero investigaciones posteriores  aportaron otro elemento. Lugones estuvo muy enamorado de una muchacha que conoció en una de sus conferencias en la Facultad de Filosofía y Letras. Mantuvo con ella una relación sentimental y apasionada. Descubierto y presionado por su hijo, debió abandonarla. Esto lo habría precipitado en un declive depresivo que acabaría así con su vida. Sus descendientes tampoco escaparon a su destino trágico: Leopoldo Lugones (hijo, apodado Polo), se suicidó en 1971. Su hija Susana fue detenida y desaparecida por la Dictadura argentina en 1978.  Su bisnieto  Alejandro, se suicidó al igual que su bisabuelo en Tigre. Esto conforma un destino familiar trágico, curiosamente muy parecido al de la estirpe de Horacio Quiroga su amigo y admirador, y del de su amiga Delmira Agustini.

1940- Walter Benjamin (1892-1940): se suicidó en la población catalana de Portbou, en la frontera hispano-francesa, mientras intentaba escapar de los nazis, aunque no se tienen pruebas de que realmente fuera un suicidio, ya que se estaba administrando morfina, y los médicos que lo atendieron supusieron que un exceso del narcótico pudo haber acabado con su vida.

Virginia Woolf
1941- Virginia Woolf (1882-1941): se suicida por miedo a la locura. Se llenó los bolsillos de piedras y se arrojó al río.

1941-Stefan Zweig (1881-1942): se mata con una sobredosis de Venoral, junto a su esposa.

1943- Pedro Picatto (1908-1944): poeta uruguayo.

1945 - Pierre Drieu La Rochelle (1893-1945):  fascita que se suicida al finalizar la II Guerra Mundial al enterarse que se ha dictado una orden de arresto contra él.

1949- Klaus Mann  (1906-1949): autor alemán que combatió el nazismo. Se suicidó  luego de algunas rupturas sentimentales en un hotel de Cannes.

1950- Césare Pavese (1908-1950): El desengaño amoroso que sufre tras la ruptura de su relación sentimental con la actriz norteamericana Constance Dowling - a la que dedica sus últimos versos, y su malestar existencial lo llevan al suicidio en Turin.

1956- Aleksandr Fadéyev (1901-1956): Durante sus últimos años de vida sufrió de desórdenes en el riñón que, aunados a su alcoholismo y a una severa depresión, provocada por la fuerte censura que recibió por parte del gobierno de Nikita Jrushchov, lo orillaron a cometer suicidio el 13 de mayo de 1956.
Su nota suicida dejaba muy patente su desilusión ante el rumbo que había tomado el Partido Comunista de la Unión Soviética después de Stalin: “Es imposible para mí vivir más lejos del arte, al cual he dado mi vida, ya que ha sido destruido por el ignorante y arrogante mando superior del Partido y este mal no puede ser enmendado. Los mejores exponentes de la literatura - un número que los sátrapas zaristas no podían ni soñar llegar a tener - han sido físicamente exterminados o han muerto bajo la mirada condescendiente y criminal de aquellos que ostentan el poder".

1961- Ernest Hemingway (1899-1961): se suicida de un disparo de escopeta.

Sylvia Plath
1963- Sylvia Plath (1932-1963): se mata con el gas de la  cocina tras haber ingerido una buena cantidad de somníferos.  Había intentado suicidarse antes un par de veces.

1969- José María Arguedas (1911-1969): En 1966 tuvo un primer intento de suicidio, producto de la depresión. Desde algunos años atrás, el escritor venía recibiendo múltiples tratamientos psiquiátricos. En 1963,se encerró en un baño de la Universidad Agraria y se disparó un tiro en la cabeza, del cual murió después de pasar cinco días de penosa agonía. El  mismo día del disparo fatal, le había escrito lo siguiente a su esposa Sibyla: “¡Perdóname! Desde 1943 me han visto muchos médicos peruanos, y desde el 62, Lola, de Santiago. Y antes también padecí mucho con los insomnios y decaimientos. Pero ahora, en estos meses últimos, tú lo sabes, ya casi no puedo leer; no me es posible escribir sino a saltos, con temor. No puedo dictar clases porque me fatigo. No puedo subir a la Sierra porque me causa trastornos. Y sabes que luchar y contribuir es para mí la vida. No hacer nada es peor que la muerte, y tú has de comprender y, finalmente, aprobar lo que hago”.

1969- John Kennedy Toole (1937-1969): se mata con el gas del auto.
 
1970- Paul Celan (1920-1970): Se suicidó arrojándose al río Sena desde el puente Mirabeau (París) en la noche del 19-20 de abril de 1970.

1970- Yukio Mishima (1925-1970): se mata siguiendo el rito de los samurais.

1972- Gabriel Ferrater (192-1972):  se suicida, al cumplir 50 años, asfixiándose  al atarse una bolsa de plástico en la cabeza, al parecer por miedo a envejecer.

1972- Eliseo Salvador Porta (1912-1972): escritor uruguayo.

Yasunari Kawabata
1972- Alejandra Pizarnik (1939-1972): A los 36 años se quitó la vida ingiriendo 50 pastillas de un barbitúrico (Seconal) durante un fin de semana en el que había salido con permiso del hospital psiquiátrico "Pirovano" de Buenos Aires, donde se hallaba internada a consecuencia de su cuadro depresivo y tras dos intentos de suicidio.

1972- Yasunari Kawabata (1899-1972): muere por una sobredosis de somníferos.

1977- Luis Hernández (1941-1977): poeta peruano. Falleció en la ciudad de Buenos Aires, adonde había viajado para tratarse una enfermedad mental. Presuntamente, el poeta se suicidó lanzándose a las vías férreas. A principios del 2000, surgió una versión distinta sobre la causa de su muerte, la cual decía fue un homicidio, pues, según dicha versión, no existían registros de su tratamiento en la clínica a la que habría ido a tratarse, aunado al hecho de que en el lugar del supuesto suicidio era usual encontrar cadáveres de "accidentados" o "suicidas" al parecer "dejados" por los militares argentinos.

1980- Haydeé Santamaría (1922-1980): se mata de un disparo en la cabeza.

1983- Arthur Koestler (1905-1983): se suicida acuciado por su enfermedad de leucemia y parkinson.

1984- Truman Capote (1924-1984): Su depresión lo llevó a un proceso de autodestrucción, dependiendo cada vez más de los psicofármacos que, combinados con el alcohol, deterioraron su salud y sus relaciones con todos sus amigos, hasta morir por sobredosis.

1985- Martha Lynch (1925-1985): Le aterrorizaba el deterioro físico y la decrepitud intelectual. Temia que se olvidaran de ella. Producto de una larga depresión, se suicidó en su habitación con arma de fuego

1990- Bruno Bettelhein (1903-1990): Al final de su vida sufrió de depresión, y se suicidó en 1990, seis años después de que su esposa muriera de cáncer.

Juan Agustín Goytisolo
1991- Jerzy Kozinski (1933-1991):  dijo en una entrevista que, aunque no tenía tendencias suicidas, quería conservar la posibilidad de elegir su final si una enfermedad terminal afectase a su mente o su cuerpo. En efecto, Kosinski se suicidó en 3 de mayo de 1991, tomando una dosis mortal de barbitúricos, su habitual ron con Coca Cola, y asegurándose del resultado introduciendo su cabeza en una bolsa de plástico. Dejó una nota: "Me he ido a dormir por un rato mayor de lo habitual. Llamando Eternidad a ese rato"

1997- Bohumil Jrabal (1914-1997): checo. Se cayó por la ventana del Hospital mientras le daba de comer a las palomas. Hay quien dice que se suicidó por el dolor que le causaba la artrosis.

1999- Juan Agustín Goytisolo (1931-1999): muere en Barcelona. Estaba solo en su casa cuando cayó por la ventana a la calle. Varios amigos hablaron en seguida de suicidio. El poeta llevaba algún tiempo deprimido, pero la familia desmintió más tarde esta afirmación.

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1 comentario:

Patricia K. Olivera dijo...

Parece mentira que la gente más creativa no pueda lidiar con sus voces internas; los mejores creadores se han ido a una edad muy temprana y de muerte trágica en su gran mayoría. Muy buen informe, sinceramente no sabía que Quiroga había tenido ese fín y mucho menos sus hijos, destinatarios de tan bellos cuentos.

Gracias por compartir, por algo van cada vez más en ascenso.
Creo que a la cultura no le dan mucha bolilla porque no les sirve que la gente piense por sí sola.
El conocimiento nos hace libres, no??

Un abrazo!!