EDITORIAL

El frustrado viaje del Gaucho

Aldo Roque Difilippo

Durante tres horas el Intendente Guillermo Besozzi  explicó a los ediles que decidió dar marcha atrás y no trasladar el monumento al gaucho de la Plaza Independencia a la radial de Ruta 2, ya que “el 99,9% de la población está en contra. Hasta mi madre tengo en contra”. Además explicó lo gastado por la Intendencia de Soriano en la construcción del Polideportivo “Ciudad de Mercedes”, y los proyectos de inversión privada en la estancia Odoñana en Playa de la Agraciada.

El pasado lunes los ediles fueron convocados a la sesión quincenal, pero imprevistamente llegó el Intendente Besozzi y pidió ser recibido por el plenario. Tan imprevista fue su visita que ni los coordinadores de las bancadas del Frente Amplio y el Partido Colorado sabían que se produciría. Incluso algunos ediles blancos se asombraron cuando lo vieron llegar y sentarse junto al Presidente de la Junta. “Vine presionado por la prensa” comentó Besozzi, en alusión a un artículo periodístico de los colegas del Semanario Entrega 2000, explicando que desistió del proyecto lanzado de trasladar el monumento al gaucho porque la población se ha manifestado contraria a  esa idea: “no hay como la sociedad, que la mayoría de las veces, o siempre tiene razón” comentó. Adelantando que en sustitución promoverá la creación de un monumento a la bandera en la rotonda de calle Roosevelt, en la rambla, y que la Intendencia llamará a interesados a presentar proyectos para erigir un monumento que perpetúe la celebración del bicentenario del Grito de Asencio que se ubicará en la radial de Mercedes. Y además que la Intendencia erigirá un monumento a la bandera en Cardona.

Sabés una cosa

Afortunadamente el Intendente escuchó a la población y dio marcha atrás la idea de trasladar el monumento al Gaucho de la Plaza Independencia de Mercedes a la Radial de Mercedes. Una idea promovida por el Secretario General de la Intendencia de Soriano Dr. Ovidio Olivera, y que evidencia y desnuda los criterios que a veces utilizan las autoridades para manejar nuestros valores culturales. 

El propio Intendente Besozzi, unos días antes de concurrir a la Junta Departamental dialogó con HUM BRAL comentando como surgió la idea del traslado del monumento. A estas alturas un episodio anecdótico, pero que bien vale la pena trascribir ese diálogo porque evidencia la improvisación con que en algunos casos  son manejados valores culturales o el patrimonio de todos los habitantes de una comunidad. “La idea surge porque el Dr. Olivera un día a eso  de las 10 de la noche cuando uno se está por ir de la Intendencia, entonces tirando ideas que podíamos hacer salió el tema”, expresó Besozzi. “Me dice, sabés una cosa qué se me ocurrió, y si realzamos, si le damos jerarquía a algo que tenemos, y que la ciudadanía no le ha dado el valor como fecha, como sociedad,  y como lo que representa: el Gaucho  y el caballo”, llevándolo “para un lugar, ponerlo en valor, realmente. En principio me pareció una locura realmente. Al otro día, en casa empecé a  razonarlo y dije, pucha, ponerlo en valor, jerarquizarlo a una estatua de Zorrilla de San Martín”.  Comentando Besozzi que ese día se dedicó “a preguntarle a más de uno y resulta  que me decían que estaba Artigas a caballo. Otros no sabían lo que había. En el Liceo unos gurises me dijeron que estaba Artigas a caballo. Y yo dije pucha si lo habremos dejado caer en valor al monumento”.

De no haber sido por la protesta de la población en los diferentes  medios de comunicación el Intendente habría seguido con su idea y el monumento al Gaucho habría sido retirado de la Plaza Independencia de Mercedes. Más allá de considerar si el traslado hubiera sido bueno o  perjudicial, más allá de discutir si la Intendencia de Soriano está en condiciones o no de  afrontar ese gasto, más el que ocasionaría erigir otro monumento en ese espacio público;  la situación desnuda la precariedad de criterios con que a veces se mueven las autoridades para decidir sobre el destino de los bienes  culturales o materiales que son de todos.