Ventana sobre el
miedo
Eduardo Galeano
* El gran negocio del crimen y el miedo sacrifica la
justicia
En un mundo que prefiere la seguridad a la justicia, hay
cada vez más gente que aplaude el sacrificio de la justicia en los altares de
la seguridad. En las calles de las ciudades se celebran las ceremonias. Cada
vez que un delincuente cae acribillado, la sociedad siente alivio ante la
enfermedad que la acosa. La muerte de cada malviviente surte efectos
farmacéuticos sobre los bienvivientes. La palabra farmacia viene de pharmakos,
que era el nombre que daban los griegos a las víctimas humanas de los
sacrificios ofrendados a los dioses en tiempos de crisis.
La industria del
miedo
El miedo es la materia prima de las prósperas industrias
de la seguridad privada y del control social. Una demanda firme sostiene el
negocio. La demanda crece tanto o más que los delitos que la generan, y los
expertos aseguran que así seguirá siendo. Florece el mercado de las policías
privadas y las cárceles privadas, mientras todos, quien más, quien menos, nos
vamos volviendo vigilantes del prójimo y prisioneros del miedo.
Clases de corte y
confección: cómo elaborar enemigos a medida
Muchos de los grandes negocios promueven el crimen y del
crimen viven. Nunca hubo tanta concentración de recursos económicos y de
conocimientos científicos y tecnológicos dedicados a la producción de muerte.
Los países que más armas venden al mundo son los mismos países que tienen a su
cargo la paz mundial.
Afortunadamente para ellos, la amenaza de la paz se está
debilitando, ya se alejan los negros nubarrones, mientras el mercado de la
guerra se recupera y ofrece promisorias perspectivas de carnicerías rentables.
Las fábricas de armas trabajan tanto como las fábricas que elaboran enemigos a
la medida de sus necesidades.
El miedo global
* Los que trabajan tienen miedo de perder el trabajo.
* Los que no trabajan tienen miedo de no encontrar nunca
trabajo.
* Quien no tiene miedo al hambre, tiene miedo a la comida.
* Los automovilistas tienen miedo de caminar y los
peatones tienen miedo de ser atropellados.
* La democracia tiene miedo de recordar y el lenguajemiedo
de decir.
* Los civiles tienen miedo a los militares, los militares
tienen miedo a la falta de armas, las armas tienen miedo a la falta de guerras.
Es el tiempo del
miedo
* Miedo de la mujer a la violencia del hombre y miedo del
hombre a la mujer sin miedo.
* Miedo a los ladrones, miedo a la policía.
* Miedo a la puerta sin cerradura, al tiempo sin relojes,
al niño sin televisión, miedo a la noche sin pastillas para dormir y miedo al
día sin pastillas para despertar.
* Miedo a la multitud, miedo a la soledad, miedo a lo que
fue y a lo que puede ser, miedo de morir, miedo de vivir…
El hambre
desayuna miedo
El miedo amenaza.
Si usted ama, tendrá sida.
Si fuma, tendrá cáncer.
Si respira, tendrá contaminación.
Si bebe, tendrá accidentes.
Si come, tendrá colesterol.
Si habla, tendrá desempleo.
Si camina, tendrá violencia.
Si piensa, tendrá angustia.
Si duda, tendrá locura.
Si siente, tendrá soledad.
1 comentario:
Ahora la cosa se ha complicado como toda exageración.Pero en el origen de la especie, el miedo, instinto primario, fue el que en fieras batallas de entusiasmo viril nos salvó.
El miedo, si bien inhibe, trae cautelas y ellas evitan mórbidas temeridades de dudosos pronósticos sobrevivientes.
Gracias al miedo estamos salvos,vivitos, que de lo contrario nos hubiésemos, quizás, extinguido.
Gracias hoy al miedo...seguimos vivos, aunque muertos de miedo...
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