Osvaldo
Guayasamín nació en Quito –Ecuador- el 6 de julio de 1919 y
murió en Baltimore el 10 de marzo de 1999. Comenzó a pintar y
dibujar desde su infancia, y vendía sus trabajos a los turistas para
costearse los estudios. Aunque debió enfrentar la oposición paterna
para hacerlo, finalmente se matriculó en la Escuela de Bellas Artes
de Quito, en la que permaneció durante siete años y de la que
recibió el título de Pintor y Escultor en 1941, siendo el mejor
alumno de su promoción.
El
período durante el cual Guayasamín recibió su formación estética
fue el de mayor auge de la Escuela Indigenista, y la influencia de
esta corriente en el pintor es evidente desde sus obras iniciales. En
1942 realizó su primera exposición en Quito, que causó gran
escándalo por su marcado carácter de denuncia social. Poco después
se trasladó a México, donde trabajó algunos meses con el gran
muralista Orozco,
quien ejerció una importante influencia en la definición del
lenguaje estético del joven pintor ecuatoriano.
En
1943 pasó siete meses en los Estados Unidos recorriendo distintos
museos a fin de estudiar las obras de Goya y El
Greco,
entre otros maestros. A comienzos de la década de 1940 trabó
amistad con Pablo Neruda y realizó un largo viaje por Chile, Perú,
Argentina, Bolivia y Uruguay, durante el cual tomó apuntes para su
gran serie Huacayñán ("El
camino del llanto"), compuesta por más de cien telas que giran
en torno a la temática del indígena, el negro y el mestizo en
América.
La
realización de este trascendental trabajo fue posible gracias al
apoyo que le brindó Benjamín Carrión desde la recién creada Casa
de la Cultura. Las telas que integran la serie Huacayñán fueron
expuestas por primera vez en 1952, en el Museo de Arte Colonial de
Quito y, a lo largo del mismo año, en la Unión Panamericana de
Washington y en la III Bienal Hispanoamericana de Arte, realizada en
Barcelona (España), que le concedió el Gran Premio de Pintura.
Guayasamín
ha aunado la fuerza de la temática indígena con los logros de las
vanguardias de principios de siglo, especialmente el cubismo y el
expresionismo, elementos que se advierten en el mural en mosaico de
cristal veneciano denominado Homenaje al
Hombre Americano, que realizó en 1954
para el Centro Simón Bolívar de la ciudad de Caracas, Venezuela. En
1957 recibió el Premio Mejor Pintor de Sudamérica, concedido por la
Bienal de São Paulo, Brasil.
Durante
1958 realizó dos importantes murales en el Ecuador: El
descubrimiento del Río Amazonas,
realizado en mosaico veneciano, que se encuentra en el Palacio de
Gobierno de Quito, y el mural Historia
del Hombre y la Cultura, para la
Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Central del Ecuador. En
1960 recibió el Gran Premio del Salón de Honor de la II Bienal de
Pintura, Escultura y Grabado de México, un galardón que significó
el comienzo de su proyección internacional.
Tras
varios años de intenso trabajo, en 1968 presentó en el Museo de
Bellas Artes de la Ciudad de México su segunda serie de envergadura,
titulada La edad de la ira y
compuesta por 260 obras que se agrupan por series (Las
manos, Cabezas, El
rostro del hombre, Los
campos de concentración, Mujeres
llorando), en las que el pintor recoge
diversos elementos de su experiencia vital para plasmar en una
deslumbrante sucesión de telas el drama y la tragedia del hombre de
nuestro tiempo.
La
edad de la ira ha sido considerada
una de las últimas grandes realizaciones del cartel político en
pintura del siglo XX y tras su exhibición en México fue presentada,
a lo largo de 1973, en el Palacio de la Virreina (Barcelona), en las
Galerías Nacionales de Praga y en el Museo de Arte Moderno de París.
En 1971 se dedicó al monumento escultórico denominado La
Patria Joven, que se encuentra en la
ciudad de Guayaquil y, al año siguiente, el Museo de Arte
Contemporáneo de Madrid acogió una muestra de sus últimas obras.
En
1973 fue nombrado vicepresidente, y luego presidente, de la Casa de
la Cultura de Quito, cargo que le permitió realizar un amplio
programa de difusión cultural. En 1974 recibió la Condecoración
del gobierno de Francia, que por primera vez se concedió a un
artista latinoamericano. Durante el año 1977, como homenaje a su
trabajo, el Ministerio de Relaciones Exteriores organizó en Quito
una retrospectiva de su obra, parte de la cual se expuso
simultáneamente en varias ciudades de España. En 1980 inauguró su
mural Ecuador en
el Consejo Provincial de Pichincha y, en 1982, terminó otro mural,
denominado España-Hispanoamérica,
que se encuentra en el Aeropuerto Internacional de Barajas, en
Madrid.
En
1981 la Cámara de Representantes del Ecuador reconoció la obra y la
trascendencia del artista mediante la creación de la Fundación
Guayasamín, patrimonio cultural del país, a la que el pintor donó
sus obras y colecciones de arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario